jueves, 25 de agosto de 2011




Una sonrisa, una mirada o ambas cosas a la vez, pueden ahorrarte infinidad de palabras.

Y coincidir en todos los detalles.

No podés comprarme así con tu ternura interminable, esa camisa tan canchera que tenés, un milka y una coca. Ni que me conocieras tanto. Es muy loco descubrir siempre que nos vemos que nos parecemos tanto en tantas cosas. No volvió la esquizofrenia (a decir de una gran amiga) pero si un poquito de felicidad. Me trajiste buen humor y muchas risas, gracias! Aunque me hables en hebreo, te rías de mi tos y seas un poquito bipolar, gracias otra vez por una hermosa noche.
"Andábamos sin buscarnos, pero sabiendo que andábamos para encontrarnos".

miércoles, 24 de agosto de 2011

Dos por uno más un mambito.

Creo que no voy a estar, como cuando vos no estás y yo no soy, simplemente yo. Punto y aparte. No tengo cábalas, pero no voy a guardar tu foto.

sábado, 20 de agosto de 2011

¿Qué va a llevar?

Un pocho y mente en blanco. ¿Algo más? No, es todo lo que necesitaría por el momento, gracias.

Y acá me ves, escapándole al fuego que sigue quemando.

Tengo un instinto suicida (sentimentalmente hablando) bastante importante hoy. No se si está mal, no se si está bien, no se ni qué día vas a llamar, si quiera se si vas a llamar. En fin, lo dejo a tu criterio. A mi, honestamente ya me da igual. Lo único que espero es que no me despiertes de una siesta como acostumbrabas hacer cada vez que se te ocurría hacer sonar mi telefonito. Mientras tanto lo mismo que pasa siempre hasta que sale mal. Pero como decía la abuela de mi madre María no es sonsa, sino entendida, si una vela se le apaga, la otra le queda encendida. Querido, no serás un cirio pascual pero aunque sea calificás como vela de copetín, calculo que cuenta. Creo que queda con doble sentido y no es la intención, estoy hablando de velas literalmente.

miércoles, 3 de agosto de 2011

¿Qué necesitás?

Que te extrañé eso es verdad, pero me ayudó a entender que si no estás es porque vos a mi no me merecés. Te conocí y me enamoré casi instantáneamente. Pero sabés que tengo razón NO NOS VAMOS A ENTENDER JAMÁS.
Te queda perfecta. Nota: algún día tengo que dejar de dedicarte entradas.